LA SETA DEL OLVIDO

Víspera de derribos en el poblado de los gitanos rumanos, hoy hemos estado unos pocos alas siete de la mañana fuimos para acompañar y estar junto a ellos ,porque cuando les tiran las casas encima de que los dejan en la calle les intimidan con todo el despliegue de cascos escabadoras ya lo cotamos otras veces. también para que sientan el abrazo nuestro que en esos momentos no valen para  mucho ´´ se quedan sin casa
Después de estar allí la policía ni el ayuntamiento apareció tácticas NACIS juegan con los habitantes del poblado juegan con ellos a la ruleta rusa ,es igual mañana estamos en las misma no paran ¿ como pueden jugar así con las personas.

Érase una vez una aldea que se encontraba al lado de una montaña. En esa montaña había arbustos, Eucaliptos, Secuoyas...

En fin había de todo. Estaba hasta el último roble de todo el mundo y había muchísimas termitas. Los habitantes lo cuidaban muy bien, lo regaban, le echaban abono especial, le protegía y evitaba que las termitas le atacasen. Esto lo repetían todas las noches los vecinos de la aldea.

Pero una noche se les olvidó echarle el abono y se acostaron todos los habitantes de la aldea. Esa misma noche las termitas se arremolinaron en torno al roble, estuvieron discutiendo mucho tiempo sobre si debían acercarse o no al árbol. Unas decían que los habitantes de la aldea le habían echado el abono y que no debía acercarse nadie porque estaría en peligro de muerte y por el contrario otras decían que habían visto que los habitantes de la aldea se habían olvidado de abonarlo. Después de mucho tiempo de discusión, y alguna pelea que otra, fue una termita muy valiente la que se acercó y tocó el roble, finalmente vieron que no la pasaba nada. Todas las termitas se abalanzaron como verdaderas salvajes sobre el roble y se lo empezaron a comer como quien no ha comido en su vida, así estuvieron toda la noche.

AL DIA SIGUIENTE

Los habitantes de la aldea se levantaron contentos por lo bien que durmieron, pero a la vez bastante preocupados porque pensaban que se les había olvidado algo, ¿qué sería?, ¿sería algo importante? ¡Oh, Dios mío! El roble no estaba, había desaparecido, todos los vecinos se acercaron al sitio donde antes estaba el roble y vieron que el árbol había desaparecido ¿qué podría haber pasado?

Fue un aldeano el que lo descubrió, lo supo porque las termitas no se acercan cuando está el abono especial. Esto quiere decir que las termitas se acercaron porque no habían echado el abono y así lo explicó delante de toda la aldea. Se oyó un murmullo durante un rato, cuando se paró un aldeano se acercó al hombre que había expuesto la idea y le dijo: ‘‘después de un rato de meditación hemos decidido aceptar tu teoría”.

Llegada la noche                 

Al esconderse el Sol los habitantes se pusieron las pilas, le echaron abono a todo el monte para que las termitas no hicieran de las suyas, se acostaron todos y llegaron las termitas. No tocaron una sola planta porque habían visto trabajar muy duro a los habitantes de la aldea echando abono especial. Las termitas subieron a lo alto de la montaña y se quedaron atónitas por lo que estaban viendo. En el lugar del roble estaba saliendo una seta con colores muy llamativos y brillantes. Las termitas acordaron comérsela a la próxima luna, se hizo de DIA; las termitas se escondieron como pudieron ya que estaban oyendo pasos de humanos.

Al llegar los humanos comprobaron todas las plantas y vieron que estaban perfectamente. Subieron a lo alto del monte a rendir homenaje al roble y vieron la seta. Se escuchó un silencio aterrador y al cabo de un rato dijo un aldeano: “es un regalo de Dios”. Fueron a la aldea y celebraron una fiesta, duró muchísimo tiempo -unas siete horas u ocho-, no me acuerdo bien.

Cayó la noche y los habitantes, con unas copas de más, se fueron a sus casas para dormir.

Las termitas fueron al lugar de la seta. Tenían muchísima hambre y se comieron algunos árboles antes. Cuando decidieron comerse la seta estaban casi llenas, pero se abalanzaron sobre ella y le dieron un mordisco cada una. ¡¡¡OH!!! que nos pasa, dijeron todas al unísono. Mientras se apartaban de la seta una de ellas preguntó ¿qué hacemos ahora? Ninguna de las termitas logró acordarse de lo que tenían que hacer, que era seguir comiendo. Y comiendo se hizo de DIA y los aldeanos empezaron a llegar, a las termitas se les olvidó que tenían que huir.

Llegó el aldeano y las vio allí tiradas medio groguis, y fue a avisar a los demás, pero nadie le hizo caso, porque tenían una resaca de caballo por la fiesta de anoche. Al ser la única persona que no bebió se quedó solo para solucionar lo de las termitas groguis. El aldeano, que era el más listo de la aldea, se llevó una termita a su laboratorio, la examinó a conciencia y descubrió que había ingerido un poco de la seta. No pudo saber de qué sustancias estaba hecha pero lo que sí averiguó fue que esa seta causaba pérdidas de memoria y por ese motivo la bautizó con el nombre de seta del olvido.

Los habitantes de la aldea le habían cogido cariño a la seta del olvido.

Cuando la miraban no olvidaban al roble y aprendieron a ser más responsables y cuidar el entorno y a las personas como si del roble se tratara y a las termitas por ingerir la seta se les olvidó comerse los árboles y los habitantes de la aldea las alimentaban de madera inservible y convivieron con los aldeanos y las plantas y así continuó la vida en la aldea.     

Y colorín colorado este cuento se ha acabado.

                  FIN

Perdon por el parentisis quiero dedicar este cuento sobre todo y por todo a los niños yniñas del poblado del gallinero no se me ido la olla ,este cuento lo escribio mi niño mas pequeño hace tiempo se lo e pedido y me deja que lo publique el autores MANU JOSE MANUEL CARRO PACHECO

Bien como os decia las autoridades de ningun pais incluida ESPAÑA no quieren a estos ciudadanos del mundo pues son pobres gitanos y encima RUMANOS ojala todo fuera como en el cuento de MANU  ´´´HOJALA LOS GOBIERNOS ,LA IGLESIA, EL CAPITAL Y LOS PODEROSOS ,COMIERAN DE LA SETA DEL CUENTO DE MANU ´´HOJALA SE LES LOVIDE A TODA ESTA JENTUZA PERSEGIR Y MACHACAR ALOS POBRES GITANOS RUMANOS ¿que tonta soy verdad? yo voy asegir com lo mio dando fregonazos y cepillazos con mi erramienta de trabajo haber si alguna vez tengo suerte y barro toda la mierda que mas hariba os relato valla un abrazo grande alos del poblado y a vosotros lo mismo ,no dejemos nunca solos alo que mas nos necesitan

Desde muy bajito casi desde el suelo seguire y sabreis de mi y lo que me rodea BSSSS deesta vuestra esteticien de los suelos A y gracias al autor del cuento MANU